Cuando preparamos un viaje, vamos haciendo listas con todas aquellas cosas que nos llevaremos para así no olvidarnos de nada.

A veces, las listas son inacabables, tanto si es para un viaje corto de 3 días como si se trata de un viaje de 20 ó más días de duración.

En mi caso, en el apartado de tecnología, lo primero que pienso es en la cámara. Después todo aquello relacionado con esta.

Para ponerte en antecedentes, te comentaré que antes de llegar a las listas, ya habremos preparado el recorrido y habré planificado las fotografías que iré haciendo. No, no todas, ni con el detalle que lo hace Jesús Manuel García Flores. Él es un maestro y muy perfeccionista y no deja un cabo suelto. No es mi caso, pero no porque no esté de acuerdo con el procedimiento o el fin, es que me da muchísima pereza.

Aún con todo, sí tengo claro que tipo de fotografías voy a realizar o que me gustaría llegar a materializar. Por ejemplo, si es verano, seguro que querré hacer alguna fotografía de Vía Láctea, o de cielo profundo. Con ello, me preparo algún hito o sujeto a fotografiar y el día que debe ser, por aquello de no tener luna. La mejor opción es buscar un día en el que la fase de nuestro satélite sea luna nueva.

O tal vez fotografía de costa, o de larga exposición….

Siguiendo con estos ejemplos, para las nocturnas sé que debo llevar trípode sí o sí y llevar la mochila de las linternas y luces led para poder iluminar adecuadamente el sujeto (una iglesia románica, un monolito…) y posiblemente la montura Star tracker. Y para las de costa o larga exposición, el trípode, los filtros de densidad neutra, degradados, polarizador…

Volviendo a las listas, como puedes comprobar, se hacen «eternas» y el peso va aumentando y creciendo. Cuando sales de casa con todos los bártulos, casi parece que te mudas de casa.

Por ello, hay muchas personas que llevan cada vez peor cargar con tanto cachivache, y terminan migrando al «minimalismo», que en fotografía termina siendo el móvil.

Si este es tu caso, he de decirte que los terminales de hoy en día, como cámaras, son bastante mejor de lo que eran las primeras cámaras compactas digitales, e incluso las compactas actuales. No en vano, han desbancado la venta de estas últimas, hasta convertirlas en una venta residual.

Si tienes un iPhone de ultima generación, ya habrás comprobado que incluso puedes hacer astrofografía. Qué, ¿que no te lo crees? Echa un vistazo a este vídeo que es de Nebula Photos, un grandísimo divulgador de astronomía y astrofotografía. El vídeo está en inglés, pero puedes poner los subtítulos en castellano.

Imagino que sí puedes hacer esas fotografías con el iPhone, también podrás realizarlas con un Huawei, Xiaomi o Samsung de gama alta.

Evidentemente que como cámara, un móvil pesa muchísimo menos que una DSLR digital o una Mirrorless y que el resto de su equipo. Aun con todo, tendrás que llevar un trípode, que puede ser del estilo «Gorilapod». Este tipo de minitrípodes se pusieron de moda hace algunos años y tienen la ventaja que se agarran a cualquier superficie, en plano o si es una barra, los puedes enroscar como si de una serpiente se tratase.

También es una buena idea disponer de filtros ND o de densidad neutra para el móvil. Los puedes encontrar fácilmente, pero te recomiendo que sean de cristal.

Otra cosa que debo advertirte, si llevas el móvil con funda, y la parte trasera de la funda protege las lentes, te recomiendo que retires la funda. El plástico de la carcasa va a desvirtuar la fotografía y la calidad de la misma se verá muy afectada. Si por el contrario las lentes de la cámara de tu móvil no están cubiertas, lleva siempre un pañuelo de limpiar lentes, que no dejan pelillos ni motas y limpia las lentes bien antes de apretar el disparador. Ojo, nunca se pasa el pañuelo sin mas, primero hay que soplar bien las lentes, para retirar cualquier resto de arenilla o polvo que podría arañar el cristal, después se pasa con cuidado la gamuza y preferentemente no de forma circular.

Si vas ha realizar una toma con el móvil encima del trípode, o de larga exposición, lo recomendable es ajustar el modo de disparo con retardo, bien de tres segundos o de diez. De esta forma, no saldrán desenfocadas o trepidadas tus fotografías al pulsar el disparador. También es aconsejable si disparas con el móvil en la mano en situaciones con poca iluminación.

En cuanto al flash se refiere, tengo que decirte que la potencia de este flash es muy limitada. Normalmente el número guía o alcance del mismo, es pequeñísimo, con lo que iluminar una gran escena con ese flash será nulo. En estos casos, es mejor desactivar el flash, ya que el procesador advierte que el móvil no va a aportar luz extra y se ajustará para obtener mejor iluminación con la luz ambiental.

Pero si vas a fotografiar un contraluz, por ejemplo, una puesta de sol, y tu modelo está detrás de la luz del sol poniéndose en el horizonte, activa el flash en modo «sí». No te distancies mucho de tu modelo y dispara. Verás que la luz del flash rellena de forma frontal y no saldrá oscura la persona, animal o elemento que querías fotografiar.

Otra cosa que debes saber, y seguro que tú lo haces, pero no te puedes imaginar la cantidad de veces que me encuentro haciendo una fotografía y hay alguien al lado, intentando realizar una toma y no enfocan lo que quieren fotografiar. Hay que tocar la pantalla del móvil para decirle este lo que quieres que salga enfocado. Ya que si tienes elementos en primer plano y en segundo y tercer plano, seguro que tú elección no es la del móvil. Este no piensa por ti, de forma que pulsa primero al sujeto a fotografiar y después dispara con el botón que sale en la pantalla, o con los botones de subir o bajar el volumen de tu móvil. Esto hace que todo sea muuuucho más fácil.

También he de decirte que el sensor de los móviles, es bueno, pero algo limitado. Donde lo vas a notar es en el ruido que te va a generar en las partes más oscuras de las escenas con poca iluminación. Hay programas que ayudan a eliminar este tipo de problemas, pero no son milagrosos, aún así, funcionan bastante bien como TopazDeNoiseAI.

Espero haberte ayudado con esta serie de trucos si has decidido no castigar tu espalda con una mochila o bolso lleno de aparatos de fotografía para una réflex o mirrorless.